Kinus 2022: Un Paseo de Descubrimiento
“Deja tu tierra, tu lugar de origen, la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré”.
(Génesis, 12:1, Torá, un comentario moderno, PLAUT, G., SP: UJR, 2021)
El judaísmo es movimiento. Es un camino hacia el descubrimiento, en sí mismo y para otro. Esa mirada se renueva en partidos y encuentros, y Kinus es un momento decisivo en este camino. Kinus 2022, realizado en Argentina después de dos años de pandemia y contactos virtuales, representó para mí, como el judaísmo, un acto de valentía. En un mundo incierto y tumultuoso, que ha priorizado las tenues conexiones virtuales, que crean la falsa idea de presencia en el compartir espejo de la pantalla, este encuentro rescató un sentido profundamente judío: el intercambio de experiencias y experiencias que necesitan ser escuchado directamente.
En una semana intensa, pude convivir con compañeros de diferentes países, también de diversa procedencia. Fueron días de intenso aprendizaje: estudios teóricos, análisis textuales, tefilot, expansiones creativas y momentos de risas y socialización. Es un soplo de energía para los participantes, ya que el cambio de escenario siempre abre una nueva mirada a los interrogantes y dudas que aquejan a quienes trabajan directamente con la comunidad. Se rompen paradigmas, se rompen rutinas, hay discusión, debate, reflexión…
Kinus 2022 fue la síntesis del mundo judío, en su colorido caleidoscopio que saca nuevas composiciones entre líneas de textos antiguos. Dejo esta experiencia enriquecida y fortalecida: nuevas ideas, nuevos proyectos, una red de apoyo para afrontar los retos que tengo al trabajar en una comunidad en formación.
Así, este desplazamiento, este movimiento de salida y encuentro fue el momento de entrelazar los hilos de las actividades desarrolladas por el Instituto durante los últimos dos años, creando un tejido único. Regreso a Santa Catarina, Brasil, portando este tejido de tejidos flexibles, pero que no se rompen, inspirado a crear nuevas formas y a coser, junto a mi comunidad, un judaísmo actual y vibrante porque, como dice João Cabral de Melo Neto ,
“Un gallo solo no teje una mañana:
Siempre necesitará otros gallos
De uno que coge ese grito él
Y tíralo a otro.”[1]
En Kinus, este grito se lanzó y se extendió por muchas comunidades.
Ethel Scliar Cabral,
Estudiante de rabino y mentor en UNIVRI, União Israelita do Vale da Região do Itajaí (Santa Catarina, Brasil)